Con una variada oferta de actividades a lo largo de la semana, la comunidad educativa celebró el Día de la Educación Técnico-Profesional, poniendo el énfasis en la importancia que este tipo de educación tiene para sociedad actual.

La celebración se inició el lunes 20 de agosto en la Plaza de Santa Bárbara, donde un grupo de estudiantes de III y IV medio dio a conocer a la comunidad las actividades y productos que desarrollan en sus módulos de Especialidad. En un stand informativo mostraron almácigos, hierbas medicinales y resolvieron dudas sobre el manejo ovino con quienes se acercaran a visitarlos.

Entre tanto, otro grupo de estudiantes de los mismos niveles participó en una charla del Programa de Desarrollo Territorial Indígena (PDTI) de Santa Bárbara, donde se produjo un interesante intercambio sobre las labores que los técnicos agrícolas desempeñan junto a los productores y emprendedores agrícolas del territorio.

Por la mañana del martes 21 se realizaron actividades en el propio establecimiento para visibilizar la importancia de los técnicos agrícolas en el cuidado de la naturaleza y la protección del medio ambiente, y análisis de información de prensa relativa a la exportación de productos agrícolas y pecuarios. Por la tarde, estudiantes de III medio participaron en una experiencia de aprendizaje-servicio (A+S) consistente en la creación de áreas verdes en la Escuela Básica Diferencial y el Jardín Infantil “Mis primeros pasos”.

El jueves 23, estudiantes de III y IV fueron protagonistas de actividades formativas dirigidas a los otros niveles del establecimiento, haciéndose cargo de la preparación y ejecución de módulos de formación técnico-profesional, con el apoyo de sus docentes, actividad que continuará la próxima semana alcanzando a toda la comunidad escolar.

La primera semana de la celebración de la ETP culminó con una charla sobre el compostaje para vecinos del sector Los Naranjos, a cargo de III medio. Además, participó un grupo de estudiantes de I medio, compartiendo los aprendizajes que han logrado mediante el desarrollo en un proyecto de reciclaje (aprendizaje basado en proyectos, ABP).

A Henry Huenupe, de III medio, le gustó mucho la experiencia, porque aprendimos harto. Pudimos conversar con las señoras que hablaban lengua indígena, que también la hablo yo, entonces nos comunicamos perfectamente. Presentamos temas sobre compostaje y ellas nos dieron unas plantitas. El ambiente que hubo fue acogedor y familiar.”

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